27.7.09


Estoy sentada en casa, sola, con la única compañía de la pena... Es ahí donde empiezo a pensar. ¿Realmente vale la pena amar?

Mucha gente, seguramente, me va a decir: "Aldana, sos muy joven para enamorarte, disfruta de la soltería". A esos, les voy a contestar, no puedo estar sola. Soy así, necesito tener a alguien a mi lado que me diga que me quiere, que me bese, y que, fundamentalmente me ame y me lo demuestre.

Otra gente, me va a decir que ya va a llegar el hombre que me ame de verdad, que me trate como merezco, y que me sea fiel, ante todo. Pero yo les respondo. No, no existe la fidelidad eterna, y esos hombres ya no existen. Lo único que quieren hoy en día, es que nos enamoremos, y que les demos lo que ellos quieren, sexo. Para luego dejarnos tiradas, enamoradas, y sin la más minima gana de vivir.

Últimamente, me estoy dando cuenta, que realmente no vale la pena amar, no vale la pena dejar de lado la felicidad, y sacrificarse por una persona, que, seguramente, ni siquiera se de cuenta de todo lo que hacemos por ella.

Pero la peor parte, es que aún teniendo la certeza de que la persona que amo con toda mi alma me engaña, me miente, y sale con otras mujeres; sigo con el, y no me importa. No me importa tener los cuernos más grandes del mundo, porque lo único que quiero es tenerlo a mi lado, y pasar cada uno de mis días con el; aunque eso sea una simple ilusión.

Yo en el amor, tengo pensamiento de vieja, a mi me gustaría conocer al hombre que será mi marido, padre de mis hijos, con el cual voy a compartir el resto de mi vida, y el que va a llorar el día que yo deje este mundo. Pero, últimamente, no me llevo más que decepciones en el amor. Y empiezo a replantearme seriamente...

¿Acaso estaré equivocada yo?

23.7.09


No puedo más!


No puede ser que la única forma que tenga de desquitarme sea cortándome, o escribiendo cosas relacionadas con lo que siento. Necesito estar bien ya!, no sé qué va a ser de mí... Siempre ando ocultando cosas o recurriendo a otras que sólo hacen que empeore; mi relación con los demás está cada vez más cerrada, me cuesta compartir cosas, hablar; me cuesta ser sincera todo el mundo, me cuesta sacar todo lo que está dentro de mí, cada cosa que expreso sólo son la parte superficial de lo que realmente siento o pienso. Cada día que pasa, me siento una mierda, no poder cambiar para el bien, pensar todo el día en esas cosas. Me llegan presiones extras desde todos lados; quiero salir de mi casa, pero cuando estoy fuera de ella, quiero estar en casa. Vivo encerrada en mi pieza, no puede ser!, tengo una familia, tengo amigos, ellos siempre están pendientes de lo que hago, siempre me acompañan; y que ahora no me entienden; perdón, ni yo me entiendo.

19.7.09


Envidio a la gente que tiene la capacidad de llorar cuando se siente mal y se quedan tan a gusto. Yo no puedo. No me sale. Lo intento y queda más falso que un billete de $500. No sé qué es lo que me lo impide. De verdad que me encantaría hartarme de llorar durante diez minutos y decir: “Que gusto que me dí”. Pero no hay manera. Como mucho se me humedecen los ojos un poquito viendo una película. De vez en cuando, una lagrima. Pero eso de la cara empapada y los ojos rojos como tomates no lo he hecho en mi vida.

Y me gustaría hacerlo. Si sirviese de algo ahora.